31.12.05

Cumple.

Mañana de nuevo, otra historia nueva empezará. Será aburrido de nuevo y no hallaré las cosas nuevas que todo mundo dice que pasan cuando comienzas cada año nuevo.

Cuando es que comencé a dejar de vivir? y cuando es que comencé a permitir que la vida venga y vaya? Según lo que recuerdo nunca, pero jamás me he ocupado de vivir mi vida propiamente... siempre termino por vivir la vida de acuerdo a lo que dicen los demás; y en definitiva, esa no es vida.

La cuenta regresiva se acaba de disparar, 365 días para vivir lo que no has vivido nunca, 365 días para amar como nunca has amado, 365 días en los que podrás pensar y disfrutar las cosas de un modo en el que no habías reparado jamás... 365 días que echaré a la basura, igualmente que el resto de la vida que he llevado; estos trescientos sesenta y cinco días no me sirven de nada, no me servirán de nada, no servirían aunque fueran 366.

Ahora seguiré escuchando mis mismas canciones que me deprimen y visitaré los mismos tristes lugares que me hacen sentir peor de lo que estaba, viviré la misma existencia solitaria a la que ya me acostumbré y, por último moriré a lo largo de este año... moriré más de lo que ya lo hice los últimos 22 años...

Uno nunca sabe...

30.12.05

En sí.

Estoy escribiendo desde casa de mis hermanos, hoy la vida sonríe un poco, pero es tiempo cada vez más cercano de las fechas grandes en que uno quisiera desaparecer. Extraño una gran parte de mí, extraño esa parte que me dejaba ser alguien a quien no le importaba nada ni nadie. Hoy tengo que admitirlo, tengo hermanos por quienes preocuparme y a quienes querer. Es una razón para aguantar la existencia por más tiempo.

Me admiro de la disposición de las cosas en el cuarto de mi hermano, los colores son una invitación a pensar en las posibilidades de crear arte, me dan la sensación de estar en el estudio de un próximo pintor y escultor al que el mundo deberá respetar por el simple hecho de la creatividad que tiene. Después de ver el de mi hermana, me doy cuenta de que de ella espero todo, sé que va a ser una maestra excepcional, estar cerca de ella es como saberte querido, protegido y demás; ella es para mí la promesa de que por lo menos conocí a alguien que hará algo importante, alguien que yo podré presumir de haber conocido cuando estaba desarrollando su talento.

Inevitablemente la ansiedad viene de nuevo, ya está tan cerca que puedo olerla, saborearla no porque la ansiedad no me gusta, sin embargo sé que debo permitirle que llegue y que destruya lo poco que he logrado construir, la siento ya rozando mis labios, viene solamente por mí.

Y mientras escucho 3 Libras y extraño a mis hermanos, sigo escribiendo, dominando el impulso de llorar sobre el teclado y tratando de aguantar la tristeza de sentirme ajeno al mundo de nuevo y no poder llorar a mis anchas, trato de levantar la mirada y procurarme una visión que me saque de esta. Una vez más... y ahoa los veo...

Uno nunca sabe...

23.12.05

Basura.

De nuevo. De nuevo empiezan las cosas y se cierran ciclos. Tengo una maldita tos que no me deja siquiera pensar y tengo una bola de amigos que me hacen sentir bien. ¿Cómo hago para que me interesen otras cosas que no sean música y batería? ¿Qué hago sin escuela ni libros ni fe ni creencias? ¿Qué hago si ya me perdí a mí mismo?

Creo que el retumbar de los parlantes me ha dejado mareado permanentemente, creo que ahora ya no puedo beber alcohol porque podría matarme al primer trago (aunque pensándolo bien sería algo muy bueno). Como diría Eddie Vedder: "It's evolution babe" (de igual manera, no sé por qué en estos días he tomado muchas frases de famosos, pero ahí están) Gracias Gi, neta gracias.

Ahora ya después de ir al cine y ver películas al vapor, creo que puedo criticarlas y decir vulgaridades sobre ellas. Creo que después de vivir (ya casi) 22 años, puedo criticar la vida y decir vulgaridades de ella. Ya puedo decidir si la sigo viviendo o no. Maldita infección de garganta, malditas punzadas en los oídos.

Tal vez ahorita mismo salga a pedir posada, por lo menos que me den algo de comer. Espero poder caminar en el frío con camiseta delgada, pantalón de mezclilla y sin calcetines, y no enfermarme más de lo que ya estoy; lo que sufro de estar con tos es el dolor de oídos, no sufro la enfermedad en sí. Estoy que me lleva el diablo con la escurridera de nariz, preferiría sangrar de los oídos, al menos se harían coágulos.

Justo ahora comienzo a sentir frío de nuevo. Justo ahora me empiezo a sentir vivo de nuevo (me relleva). Escucho el ruido del zaguán que abre y permite el paso a esos individuos desconocidos para mí pero con los que he vivido desde siempre (bueno con ella, con él no). Imagina que me asaltaron y me mataron y resulta que no estoy.

Párrafos pequeños y frases cortadas, no expreso nada en absoluto, escucho los extraños ruidos del sanitario y siento asco. Un pequeño pero gordo par de piernas baja las escaleras. Mi garganta me sigue doliendo. El ruido del ventilador de la computadora ya me parece insoportable y los rechinidos de las vetustas patas de mi silla están perforando mi cráneo como si fueran brocas con carboloy en cemento reblandecido.

Uno nunca sabe...

9.12.05

Espacio.

Tratando de representar un papel que no es el mío, tratando de ser alguien que no soy ni seré. Aquí estoy otra vez, desesperado y ahogado en mí mismo, una vez más que se agrega a las anteriores. Me reprocho automáticamente y pienso que ahora si ya es tiempo de irme, hora de partir; no lo he decidido bien aún.

Hoy estaba conduciendo de regreso a casa, los caminos trajeron viejos recuerdos, la humedad se filtró desde dentro y no pude evitar bajar la vista varias veces en el camino. Mi alma se estaba tratando de escapar por mi boca, quería dejarla pero tenía que regresar el auto a casa.

Hoy me ví pensando toda la tarde, me encontré una y otra vez repasando todos los eventos de mi vida, reencontrando sentido a unos y desechando en definitiva otros que ya no tiene caso conservar. Ayer tenía sueños, ilusiones y ganas de estar presente a cada momento, hoy no tengo creencias, no tengo nada, me quedé comodiría Sor Juana: "con la cabeza desnuda de ideas."

Mañana sé que estaré rogando por estar bien y sé que me voy a desesperar tratando de mantenerme en una sola pieza. Pero trataré de engañarme y fingiré: ya no más, ya no rogaré, esta vez yo no haré nada, no buscaré la calma sino más bien la calma volverá a mí. Sangrará mi nariz y veré todo borroso una vez más.

Pensaré en cosas vanas y en otras cosas importantes. Imaginaré demonios y otros mundos, me preguntaré porqué lagrimea el metro y luego estaré insisitiendo en la sangre seca y las lágrimas embarradas en la cara, triste y desolada que me ha quedado; sé que adelgazaré un poco, sé que mi carne medirá menos y que mi alma estará de fuera todo el tiempo, pero ya no me importa. Ya no.

Uno nunca sabe...

3.12.05

Nota.

¿Es mecánico o sistemático? El amor es la cosa más extraña de la vida, todos lo necesitamos, todos lo queremos, todos lo odiamos en algún momento y en definitiva, nadie puede vivir sin/con él. Sin embargo allí está.

Sin él no podríamos continuar la existencia de la especie humana, con él todo mundo se enoja y arma guerras; ¿cuál es la bendición del amor? ¿crees que es lo máximo de la vida estar enamorado? ¿tienes el brillo en los ojos que supuestamente deberías tener por estar enamorado (a)? Lo dudo.

La ilusión comienza, avanza e inevitablemente se pierde alguna vez. Puedes ser el (la) más tierno(a) y más comprensivo (a); pero un día, de la nada, todo se irá a la basura, de nada habrá servido el esfuerzo y el sudor y sangre derramados porque todo se echará a perder. Las luces se van a apagar.

¿Y cómo hacer un escrito post-mortem al amor? No tengo la menor idea, solamente podría pensar en el espíritu muriendo acuchillado en la calle, pero auxiliado a cada momento por los que creen en él y un minuto después, ellos mismos lo vuelven a apuñalar. El amor se muere gracias a los que creen en él.

Y con las lágrimas a punto de salir, con los dedos temblorosos del frío, las piernas endurecidas para aguantar más la temperatura, la mandíbula apretada en búsqueda de contener el coraje y la sangre hirviendo por dentro, me atreveré a decir: "Quiero ser parte de esos que auxilian y matan al amor." Apuesto a que mi perspectiva siempre será externa.

Uno nunca sabe...